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domingo, 8 de enero de 2012

Los beneficios de hacer ejercicio cuando tienes cáncer

Los beneficios de hacer ejercicio cuando tienes cáncer
Escrito por David Haas

Tratar el cáncer puede ser una tarea abrumadora. Aparte de los aspectos físicos de tratamiento y cirugías, también puede ser emocional y mentalmente agotador. Frustración, depresión y agotamiento acumulan con el tiempo, lo que dificulta mantener una actitud feliz y positiva alrededor de amigos y familiares. El ejercicio es una de las formas fundamentales que tienen las personas con cáncer para mantenerse ocupado de la afluencia de las emociones que suscita tal enfermedad devastadora. Éstos son sólo algunos de los beneficios que ejercen a lo largo de las diferentes etapas de diagnóstico, tratamiento y remisión:

Mejora el estado de ánimo: Muchos hombres y mujeres dicen que la mejor manera de describirlo es como tener una "nube" colgando sobre ellos después de recibir el diagnóstico de cáncer de su médico. Esto podría persistir durante el tratamiento. Este comprobado que la actividad física puede levantar el espíritu. Las endorfinas lanzadas después de un fuerte entrenamiento hará a cualquiera feliz y puede ayudar a mejorar el estado de ánimo e incluso traer una sonrisa a la cara de una persona.

Un sentido de Control: tener cáncer significa para muchas personas una dependencia cada vez mayor sobre los demás. Es posible que necesites que tu pareja cuide de ti, que tus padres te lleven a las innumerables citas médicas, o tus amigos para que te traigan comidas y chequeen en ti. Con el tiempo esto puede hacer que te sientas incapacitado. Al incorporar el ejercicio a la rutina diaria, un paciente es capaz de tener un sentido de control sobre su situación. Incluso un corto paseo por el barrio puede hacer sentir como si estuviera a cargo de su propia vida.

Autoestima: Tanto cáncer como los diversos tratamientos para enfermedades como el linfoma, mesotelioma y cáncer de ovario, entre otros, pueden ser devastadores para el interior y el exterior del cuerpo. La cirugía puede dejar cicatrices, y falta de ejercicio o apetito podría dejar un cuerpo una vez fuerte, débil o con sobrepeso. Ejercicio produce más masa muscular y ayuda al cuerpo a lucir y sentirse mejor. Incluyendo un pequeño ejercicio moderado al día han mejorado la autoestima de pacientes con cáncer cuando miran en el espejo.

Puede controlar náuseas: uno de los más temidos efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer es la náusea que acompaña a la quimioterapia y radiación. Ejercicio puede reducir esos efectos, lograr una mayor calidad de vida a los pacientes.

Incluyendo ejercicio en la rutina diaria de un paciente con cáncer, pueden obtener grandes beneficios y sentirse mejores sobre sí mismos, así como sus posibilidades de recuperación.

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